sábado, 3 de agosto de 2013

La Gran depresión (XXV)

-          Si hay bicicletas de montañas, porque como no haya, no hay quien monte por aquí.

Cuando falta poco para acercarse al puesto de alquiler de bicicletas, ven el letrero de que está todo alquilado.

Entonces, andan un poco más, para ver si hay caballos, y se dan cuenta, de que están en la misma situación.
Siguen andando hasta que ven un puesto para hacer escalada, pero corren con la misma situación, un poco más adelante hay un puesto para hacer puenting pero tampoco.

Se van a ver los museos, el primero,  estaba vacío, probablemente por la hora. Como se dan cuenta que  de que es hora de comer,  se sientan en el restaurante del museo a comer. Luego continúan viendo el museo hasta las cinco.
A las cinco, cansados se van a Lake Districk; después de andar tanto. Cogen el coche  y se van.  
A las seis, llegan Lake Districk, llegan al hotel y deciden  bajar a bañarse al río que está cerca del pueblo, en lugar de ir a la sierra.
Estuvieron bañándose hasta que anocheció y entonces, cenaron y se fueron pronto a la cama, agotados  de tanto andar.

Al día siguiente desayunaron gingerbread man, pero en lugar de forma de hombres, lo hicieron en forma de casas.
Después se dirigieron a ver como continuaban las obras, dejaron en un lugar alejado, por temor de que algún camión, les estropease el todoterreno.

Cuando se estaban acercando a la casa vieron a una mujer completamente desnuda, montada en un caballo negro, con las crines trenzadas. Sin embargo, cuando más próximos estaban a la verja, fue cuando desapareció.

En el hotel, comieron, porque como casi siempre les pasaba, no se daban cuenta de la hora que era. Esta vez en lugar de pasear como siempre, optaron por subir  a su habitación y leer, al principio se dieron cuenta, que no tenía sentido como pasaba cuando hallaron el baúl, lo iban a cerrar. Cuando encontraron algo que les llamó la atención aunque era muy corto.
“ No se si tengo todo lo necesario, porque estoy introduciendo todos mis apuntes, mi ropa todo para irme a mi piso de Hortaleza, hasta que me hagan las reformas necesarias en un piso en Serrano, con los ahorros que he obtenido gracias a una investigación del extraño cuadro, y eso que solo fueron la mitad de lo que me tenían que pagar. “

Les pareció tan raro, que siguieron buscando, por todos los lados del baúl, por si encontraban algo, pero no encontraron nada. Cuando terminaron, se fueron a pasear, hasta el ocaso.
A la hora de la cena, vieron a la recepcionista. Le preguntaron si sabía de una chica que era historiadora de arte. Le respondió que porque, dijeron que porque se había olvidado una cosa en su casa y querían devolvérselo.

A la mañana siguiente,  como era muy temprano,  se fueron con el coche a ver la iglesia, pero se dieron cuenta de que , el camino se iba estrechando poco a poco y se tuvieron que dar media vuelta, porque si no se iban a poder pasar.

Continuará......