miércoles, 8 de marzo de 2017

El Mágico trabajo

Saray de cuarenta años, llevaba trabajando trece horas en una oficina; un día se quedó dormida; como es de suponer uno de sus compañeros se lo dijo a su jefe, despidiéndola en el acto. Al año, encontró un trabajo, en este solo tenía que decir, lo que había que hacer y se realizaba sol; de vez en cuando tenía que trabajar, para que ninguno de sus compañeros hablasen. A los dos años, ascendió a jefa, pero allí tuvo que trabajar, pero aún así, ella se sentía muy feliz. Al mismo tiempo, se quedó sin trabajo, al poco tiempo, pero gracias al dinero de su esposa, abrieron un negocio que prosperó y se hicieron ricos.

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