LOS ASESINATOS V

- Policía: Buenas tardes

-Marcelo: Buenas tardes

-Policía:  ¿Dónde va con tanta prisa?

- Marcelo: voy a coger el autobús…

-Policía: ¿Por qué estabas tu sólo en la casa de las víctimas?

-  Marcelo: Verá quería asegurarme de que realmente no se encontraba en casa, después de que mis amables vecinos me acompañaran.

- Policía: Entiendo, bien hasta luego. ( No muy convencido)

-Marcelo: hasta luego.

Según va bajando por las escalera.

-          Policía: poner bajo vigilancia a un vecino llamado Marcelo ( con un walkitoki)

Nada más salir del portal

-Marcelo: ya está todo hecho (dijo riéndose entre dientes)

- Policía: no dejaré que se salga con la suya (pensó en voz alta)

Mientras iban alejándose. Ve a Marisa y a Carlos.

-          Policía: Buenos días ( dirigiéndose a Marisa y a Carlos que se acercan por la zona de la derecha)

-          Carlos: Buenas. ¿En que le podemos ayudar? (Preguntó dirigiéndose al policía)

-Policía: Acabo de hablar con su vecino Marcelo, y me ha comentado, que estuvieron con él en casa de Julia.

-Marisa: Así es, debido a que nos lo encontramos en medio de la escalera y de repente escuchamos un grito en su casa.

-Policía: entiendo, ¿a que hora ocurrió? (Interroga a Carlos)

- Carlos: hace media hora justa.(Responde mirando al policía y más al público)

- Policía: bien gracias, eso ha sido todo.

Carlos escucha de lejos al policía que dice

LOS ASESINATOS IV

 De repente en casa de Julia se oye un grito y alguien que pide socorro.

Socorro

Todos suben las carreras hacia donde piensan que han escuchado la voz.

-Marisa: a Marcelo y a Carlos ¿Escucháis algo?

-Carlos: estoy intentando escuchar. No todo está en silencio. Creo que oigo algo pero no se donde.

-Marisa: yo creo que nos debemos de ir. Esperad. Haciendo amago de oír ¿de donde proceden las voces?

-Carlos: creo que es en el antiguo piso de mi suegra. Dejadme escuchar. (Poniendo la oreja para escuchar). No escucho nada. Iré de todas formas.

Cae el telón

Segundo acto

Salón, un sillón, las cortinas cerradas, libros y estanterías tiradas y no hay nadie.

-          Carlos: ¡que raro no hay nadie en casa!

-Marcelo: sino está aquí mi querida Julia ¿Dónde estará?

- Marisa: no lo sé; lo sentimos mucho pero tenemos que irnos.

- Carlos: si vamos al cine.

- Marcelo: no os preocupéis entiendo que tengáis vuestra vida, os agradezco que me halláis intentado ayudar. Hasta luego y que disfrutéis que hace mucho que no salís.

-  Carlos: gracias por entenderlo y adiós. (Da la espalda a Marisa y a Marcelo)

-Marisa: gracias por entenderlo y adiós. (Da la espalda a Marcelo y abre la puerta igual que Carlos)

- Marcelo: He matado a la imbécil de mi suegra, y la pelota de mi novia, tengo que terminar la  faena con los pesados de los vecinos de al lado. Tengo que hacer algo especial para ellos, porque al fin y al cabo soy un artista. ¡En fin! Me iré a dar un paseo para ver que obra de arte se me ocurre. (Habla consigo mismo en alto pero dirigiéndose al público).

Según sale de la casa de Julia.

LOS ASESINATOS III

Marisa: no por nada.

Carlos: me pongo los zapatos y nos vamos(pensando, mientras se pone los zapatos y se ata los cordones, ¡que rara está) 

Sale por la derecha Carlos asustando a Marisa.

Marisa: podías haber hecho un poco de ruido. Me has dado un susto de muerte

Carlos: ¿A dónde quieres que vayamos?

Marisa: a dar un paseo por algún centro comercial.

Carlos: es una buena idea, hace mucho que no vamos.

Marisa: sí hace mucho, ¿Has cogido las llaves de casa?

Carlos: las tengo en la mano.

Marisa: Gracias (saliendo la primera)

Carlos: de nada, (después de cerrar la puerta con la llave)

Marisa: Me apetece bajar por las escaleras.

Carlos: a mí también, así hago un poco de ejercicio.

En  el rellano de las escaleras.

-Marcelo:  Hola Marisa, Juan.

-Marisa : ¿Qué tal está Julia?

- Marcelo: ya sabes como son estas cosas, cuando encima su salud era estupenda.

- Marisa: si uno nunca sabe cuando le llega la hora.

- Marcelo: me gustaría charlar un poco más pero no tengo tiempo.

- Marisa: lo entendemos.

-Carlos: hasta luego.

-Marisa: hasta luego

-Marcelo: siento el despedirme tan rápidamente, pero en estas ocasiones lo mejor es el estar con Julia, cuando se empiece a animar, podré charlar con vosotros.