Los compañeros también fueron sospechosos, pero aún así, seguían con la idea de que algo faltaba. Siguiendo con la investigación, había otro problema más, él tenía una amante.
Al ir a su casa para hablar, ella se negó a permitirles la entrada. Le mandaron un aviso de que tenía que presentarse en la comisaría, como máximo cinco días. Ella negó el haber asesinado a nadie, ya que no necesitaba dinero.
Continuará....
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